“Y ahora con el sueldo…” Experiencias y nuevos sentidos en una zona rural de Misiones ante las políticas públicas argentinas en el período 2010 – 2015

Abstract

“Y ahora con el sueldo1” es una frase que reiteradamente escuché utilizar a las personas que habitan Santa Rosa en las conversaciones que mantuvimos y fue, a su vez, la que reorientó mi trabajo de investigación para esta tesis, convirtiéndose así en el eje central de mis reflexiones. Hacia finales del año 2011 me encontraba bosquejando el proyecto de tesis de maestría y revisando la producción académica escrita acerca de la vida en las zonas rurales de la Provincia de Misiones, con el objetivo de elegir un lugar donde realizar mi investigación de campo. En aquel momento estaba trabajando en un proyecto de investigación que se enmarcaba en un campo de estudio que se estaba iniciando en Misiones y se había denominado “Psicología rural”. El proyecto pertenecía a la Licenciatura en Psicología de una universidad con sede en Posadas de la cual yo era docente e investigadora. A partir de mi ingreso a esa línea de estudio me había propuesto imprimir la tan particular “mirada antropológica” en la formación de los alumnos que fueron convocados como becarios, en las tareas de investigación. Es así que, junto a otros docentes, formamos un equipo de trabajo que se componía de dos psicólogas y yo, como antropóloga, e incorporamos tres estudiantes avanzados que se interesaron con entusiasmo en explorar un campo poco conocido por los psicólogos locales. Trabajamos bajo la dirección del Dr. en Psicología Fernando Landini, investigador del CONICET pionero en Argentina en los estudios del área de la Psicología Rural (Véase, por ejemplo, Landini, 2015), fuertemente comprometido con generar conocimiento acerca de las particularidades de las zonas rurales de América Latina y con iniciar un área de reflexión interdisciplinaria en torno a las ruralidades devenidas de diversos contextos. Con la investigación para la tesis en etapa inicial y el diseño de mi participación en el proyecto, surgió la necesidad de unificar los esfuerzos en las tareas de investigación y fue así que comencé. Con ese equipo transité los primeros pasos en campo. Más tarde, cada uno tomaría rumbos diferentes. Esos diálogos interdisciplinarios, además de enriquecedores, me llevaron a adoptar nuevas formas de mirar, explorar, pensar y, sobre todo, comprender mis intereses particulares para el presente trabajo. La investigación de campo se extendió desde principios del 2012, a finales del 2015.